Restaurantes, de capa caída

EDITORIAL

El pasado fin de semana integrantes del sector restaurantero de esta región volvieron a poner sal (con limón) a la herida, al patentizar su preocupación ante el incierto panorama económico que viene con el inicio de la temporada turística de verano de julio y agosto de este año.

Es cierto que apenas un par de días antes el presidente del Club Skal Puerto Vallarta-Riviera Nayarit, Javier Ruiz Hermoso, planteó un análisis de la situación que vive el sector restaurantero local.

Ruiz presentó números del INEGI que sustentan la tesis de que más que una baja en la llegada del turismo y de los ingresos económicos, es cuestión de redistribución y percepción.

El principal argumento es una baja del 23% del número de negocios de alimentos y bebidas en Puerto Vallarta en comparación con 2023, mientras que en Riviera Nayarit los restaurantes aumentaron 68%, es decir, solo hubo un reordenamiento.

La tesis puede estar bien sustentada con cifras de operación, pero cuando la realidad estrelló al sector restaurantero contra la pared con una baja de comensales y de ingresos económicos en la pasada temporada de Semana Santa, esa percepción se volvió una verdad inobjetable.

Y es que la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac) en Puerto Vallarta ya había dado señales de problemas turísticos y económicos en la pasada temporada de Semana Santa, cuando aseguró que vino menos turismo nacional y, en consecuencia, hubo un menor gasto en los negocios. Fue una afirmación que no cayó bien en algunos sectores, pero que encendió los focos preventivos de que algo no estaba bien.

Ahora, nuevamente la presidenta de la Canirac Vallarta, Leticia Parra, enciende los focos amarillos que, al término de la temporada vacacional de verano, podrían tornarse rojos.

Resulta que el sector espera (y confía) registrar una recuperación económica con la llegada del turismo nacional en las siguientes semanas, aun cuando las condiciones actuales distan de ser óptimas para la industria local.

“Esperemos que el verano esté igual que el año pasado, aunque sabemos que las condiciones económicas y lo que está pasando es muy diferente. Es un tema incierto”, advirtió Parra.

El asunto es que no es solo la percepción y pronóstico de la presidenta de la Canirac, pues en el mismo tenor se pronunció el empresario restaurantero Juan Pablo Martínez, quien fue categórico al afirmar que desde ahora se percibe una disminución notable en la afluencia de clientes.

“Fácil estamos un 20 o 25% abajo con respecto al año pasado. Esta temporada baja tiene una curva más descendente que la del 2024 e incluso más que la de 2023. Es preocupante lo que resta del verano, porque no se ven condiciones similares a las del año anterior”, advirtió el expresidente de la Coparmex Vallarta.

Para rematar y para que no quedara duda de la percepción del sector restaurantero local, la experimentada restaurantera Evangelina Sánchez Dueñas reconoció que junio fue difícil, pero con la llegada de los turistas nacionales en julio y parte de agosto “vamos a estar mejor. Se va sobrellevando poco a poco”, aunque la temporada no se ve tan brillante como en otros años.

“Tenemos que hacer promociones para ambos. Voy a proponer en la Cámara de Restaurantes que entre todos lancemos promociones conjuntas. A veces el 10% puede parecer poco, pero para muchos es el incentivo que los anima a venir. En mi caso, también tengo estacionamiento, que es un plus”, dijo la ex presidenta de la Canirac Vallarta.

Como se ve, hay mucho por hacer en promoción, publicidad y relaciones públicas por el destino turístico, a fin de captar más turismo nacional en esta temporada de verano en la que, al parecer, los restaurantes seguirán de capa caída…

Déjanos tu comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *