EDITORIAL
En 2013 empresarios, hoteleros y autoridades de Turismo de Puerto Vallarta y Bahía de Banderas/Riviera Nayarit lograron ponerse de acuerdo para poner en marcha, juntos, una aventura turística llamada campaña de promoción conjunta.
Tuvieron que pasar muchos años –y muchos disgustos también-, antes de que en esta región aceptaran trabajar unidos en materia de promoción, sobre todo del lado de Puerto Vallarta y del estado de Jalisco, en donde los celos pesaban más que el cemento.
Ciertamente, en ese entonces parecía un sueño guajiro trabajar juntos porque pocos empresarios y hoteleros respaldaban la propuesta. Ni hablar del gobierno, especialmente de Jalisco, en donde durante sexenios no quisieron saber nada de sus homólogos de Nayarit. Les suenan nombres como Horacio en la Secretaría de Turismo y Francisco y Emilio en la gubernatura… sí, a nosotros también.
Pero no hay mal que dure 100 años y menos quién los aguante, así que contra viento y marea la campaña de promoción conjunta inició en junio de 2013 con todo el apoyo del gobierno federal, que años más tarde presumiría –vía el Consejo de Promoción Turística de México (CPTM)- el éxito de la campaña.
Incluso, el entonces director del CPTM, Rodolfo López Negrete, puso la campaña como ejemplo nacional para otros destinos turísticos del país en donde nomás no se ponían de acuerdo para trabajar juntos en las regiones.
Desde su inicio, esta campaña permitió establecer alianzas, sociedades y acciones que facilitaron la recuperación y el crecimiento de la industria turística en esta región, que enfrentaba un drástico descenso en arribo de turismo debido a la crisis económica y financiera en Estados Unidos en 2008 y el brote de influenza en México en 2010, entre otras cosas que dañaron al turismo.
¿A qué viene todo esto? Bueno, resulta que apenas el pasado fin de semana Guadalupe Bayardi, presidenta del Consejo Coordinador de Puerto Vallarta y Bahía de Banderas, hizo un nuevo llamado a la unidad y al trabajo conjunto entre el sector privado de ambos destinos turísticos. Casi nada, ¿verdad?
Y es que Bayardi reconoce que ante el impacto de una temporada baja como la que estamos viviendo y que se perfila como una de las más difíciles de los últimos años, es necesario apretar tuercas en la región.
Es una voz autorizada que se suma al llamado urgente para procurar la unión de esfuerzos entre todos los actores del sector turístico, a fin de diseñar estrategias creativas y efectivas que impulsen la llegada de visitantes.
En entrevista con Vallarta Opina, la empresaria recordó que la desaparición del CPTM, en diciembre de 2018, significó un duro golpe para los presupuestos de promoción y, desde entonces, “el presupuesto para publicitar nuestros destinos cayó más del 50%. El Fideicomiso de Turismo de Puerto Vallarta hace mucho con lo que tiene, pero tenemos que buscar nuevas formas de promocionarnos”.
Bayardi mencionó que la clave está en la coordinación, anticipación y voluntad de colaborar. ¡Chin! Dio justo en el clavo y es que lo que menos tiene actualmente el gobierno del Nayarit es voluntad de colaborar.
A estas alturas del año es poco lo que hemos sabido de la campaña de promoción conjunta y es poco lo que se informa, es como si alguna de las dos partes (ya sabemos quién, para que nos hacemos) no tuviera la menor intención de seguir jugando en el mismo equipo.
Es por esta razón que preguntamos: ¿Y la promoción conjunta, apá? Ojalá que alguien pudiera responder o lo que es lo mismo, como decían en el programa del Chapulín Colorado: ¿Y ahora quién podrá ayudarnos?